Preguntas frecuentes

Normalmente las parejas suelen cerrar las fechas de un año para otro, por lo que a principio de año ya está el calendario casi cerrado. Reconozco que muchas veces hay coincidencias de fechas y, en esos casos, siempre respeto a la primera persona que me contactó.

Siempre voy yo con otro fotógrafo, y sólo cubro una boda al día. Creo que una boda es algo muy especial y personal y me quedo mucho más tranquilo haciéndolas yo personalmente.

Sí, os entrego todo el material en alta resolución, retocado y sin marcas de agua para que podáis hacer lo que queráis con ellas a posteriori -mandarlas a los amigos, hacer un blog/web, ampliaciones para regalar a la familia, etc.-. De todas formas, yo siempre guardo una copia del trabajo, así que si se os pierden o se borran, podéis volver a pedírmelas.

Sí, las podéis elegir. Una vez tengáis todo el trabajo en formato digital, podéis hacer una selección de las 100-200 imágenes que mas os gustan y yo editaré el álbum basándome en esa selección.

Siempre me pongo de fecha límite 30 días después de la boda. En ese plazo recibiréis todo el reportaje en formato digital. En caso de haber decidido hacer un álbum, una vez que me digáis vuestras fotos favoritas, procederé a la edición y producción del álbum. Esto suele demorarse unas 3 semanas. En cuanto esté listo, os lo hago llegar lo antes posible.

Normalmente una hora o dos. Se trata de captar suficientemente el ambiente posterior a la comida/cena. El baile, las actuaciones, los invitados pasándoselo bien... 

Nosotros preferimos estar en el lugar de la celebración, o cerca, para estar preparados por si pasa algo y poder fotografiarlo. En ese caso, sí, es conveniente que podamos tomar algo. Normalmente el catering suele contar con el equipo de trabajo (fotógrafos, videógrafos, Djs, etc.), pero está bien que lo acordéis con ellos. Si no es posible, no hay problema, en el rato de la celebración, podemos salir a tomar algo y volvemos al final de la comida/cena.

Sí. Estas opciones dependen de vosotros, de lo que os apetezca. La preboda da la posibilidad de relajaros y sentiros cómodos frente a la cámara. Elegir alguna localización que os guste especialmente, conocernos un poco más y pasar una tarde para el recuerdo. Las fotos podéis incluirlas en el reportaje o bien usarlas para cualquier otro motivo. La postboda es muy útil si el día de la boda andáis muy justos de horarios, hace mal tiempo, o simplemente si preferís dejar la sesión de fotos para otro día y durante la boda dedicaros totalmente a disfrutar de vuestros invitados. Sea como sea, estamos abiertos a escuchar vuestras propuestas.

El 50% el día de la boda (o días antes por transferencia si no queréis andar con una preocupación más ese día) y el 50% restante cuando recibáis el reportaje en formato digital.